“VENIMOS A TI, PARA ALCANZAR TU MISERICORDIA”
La mañana de ayer, en pleno tiempo de cuaresma, cerca de dos millares de jóvenes líderes de la Pastoral Juvenil provenientes de las diferentes Parroquias, movimientos eclesiales, y grupos juveniles y de Tumbes, Piura, Paita, Talara, Sullana y Bajo Piura, así como los seminaristas del Seminario Arquidiocesano “San Juan María Vianney”, se reunieron para participar de la segunda peregrinación juvenil para encontrarse con el “Señor de la Buena Muerte de Chocán”, en su Santuario de Querecotillo en Sullana.
Los jóvenes visitan al Señor de Chocán
Desde muy temprano los jóvenes se dieron cita en el Estadio “02 de Febrero” del Distrito de Querecotillo, y luego todos juntos caminaron en peregrinación hacia la Parroquia “San Francisco Javier”, donde se venera la Sagrada Imagen del Señor de Chocán.
Ellos caminaron rezando el Santo Rosario y entonando alegres cantos. Posteriormente participaron con gran fervor y recogimiento de la Santa Misa que fue presidida por nuestro Arzobispo Metropolitano Monseñor José Antonio Eguren Anselmi S.C.V. y concelebrada por el R.P. Tito Zapata Olivares, responsable de la Pastoral Juvenil Arquidiocesana, el R.P. Roland Castro Juárez, Vicario Episcopal de Sullana, el R.P. José Chero More, Párroco del lugar y Rector del Santuario, y el R.P. Marcio Ferreira de Abreu, Director Espiritual de nuestro Seminario Arquidiocesano.
Cabe destacar que, los Sacerdotes asesores de la Pastoral Juvenil de las diferentes Vicarías Episcopales, así como sacerdotes de la Vicaría de Sullana, brindaron, el sacramento de la confesión a los jóvenes peregrinos.
Cristo nos muestra el camino de la verdad
En su homilía, dirigiéndose a los jóvenes presentes, nuestro Arzobispo les dijo: “Queridos hijos, iniciando la Cuaresma han querido venir hoy en peregrinación al encuentro del Señor de Chocán, hermosísima devoción que marca nuestra devoción católica, porque sólo Él es capaz de responder las interrogantes que ustedes, como jóvenes, se formulan: ¿Quién soy?, ¿Para qué existo?, ¿Cuál es el propósito de mi vida?, ¿Para qué me ha creado Dios?, ¿Qué he de hacer para ser libre, feliz y salvarme? Han venido para tener un encuentro personal y comunitario con Jesucristo, quien es el camino, la verdad y la vida. El único que da el auténtico sentido a nuestra existencia, el único que puede llenar esa hambre y sed de infinito que tiene todo corazón humano. Han venido a encontrarse con Cristo para descubrir los caminos que Él tiene preparados para cada uno de ustedes, los caminos de la verdad, que los harán libres”.
“Sin miedo, decirle al Señor: Quiero seguirte”
En otro momento y reflexionando en el mensaje del Evangelio de hoy, que nos habla del llamado del Señor Jesús a Mateo, invitándolo a seguirlo, Monseñor Eguren dijo: “El Evangelio de hoy nos narra el llamado que hizo Jesús a Mateo, y la respuesta decidida del apóstol que lo dejó todo para seguirlo. Querido joven, el Señor te está llamando a seguirlo, confío que, tras esta peregrinación, tu respuesta renovada sea, sin miedo, decirle al Señor: «Quiero seguirte». Seguirlo supone dejarlo todo, eso quiere decir, dejar atrás todo aquello que te aleje de Él. El Señor te llama a una vocación particular, te hace un llamado específico".
«Gracias Monseñor, los jóvenes rezamos por ti”
Al finalizar la Santa Misa, Maricarmen Martínez Santos, integrante de la Pastoral Juvenil de Paita, dirigió unas palabras de agradecimiento, en nombre de todos los jóvenes, a nuestro Arzobispo:
“Querido Monseñor José Antonio y estimados Sacerdotes, que nos llenan de alegría con su presencia en esta mañana, reciban nuestro cordial y afectuoso saludo en nombre de todos los jóvenes. Me es grato poder dirigirme a cada uno de ustedes y de manera especial a usted Monseñor, como guía de la Pastoral Juvenil de la Arquidiócesis. Los jóvenes damos gracias a Dios por permitir reencontrarnos en esta segunda peregrinación al Señor de la Buena Muerte de Chocan. Las seis vicarias episcopales acompañadas por sus sacerdotes asesores estamos aquí acogiendo tu llamado. Hoy, de manera especial, expresamos nuestra gratitud total por invitarnos a celebrar juntos la Santa Eucaristía, pues ella es el centro de nuestra vida cristiana. Gracias también por el gran servicio que brinda a toda la Iglesia que peregrina en Piura y Tumbes, por tu ejemplo de vida y por tu aceptación de seguir a Dios y servir a su pueblo, con humildad y caridad, como lo hizo nuestro Señor Jesús. Gracias por continuar firme en este camino de fe".
