Pedro Castillo Terrones dejó de ser presidente de una manera que ni él mismo se imaginó.
El miércoles 07 el ex gobernante debió acudir a la sede del Congreso para defenderse de una moción de vacancia del cargo donde difícilmente la oposición hubiera logrado alcanzar los 87 votos para defenestrarlo del mando.
Lejos de hacerlo, Castillo Terrones mal aconsejado, optó por dirigir al país un mensaje en la que anunciaba la disolución del Congreso de la República y la convocatoria a elecciones para elegir una Asamblea Constituyente que se encargara de redactar la nueva Carta Magna.
La noticia del cierre del Parlamento recibió el rechazó unánime de la clase política. Tampoco contó con el visto bueno del Comando Conjunto de las FF.AA que de inmediato difundió un comunicado de respaldo al Congreso ante la decisión inconstitucional de Pedro Castillo de cerrarlo.
Sin la presencia de Pedro Castillo, el Congreso de todas maneras aprobó la moción de vacancia con el respaldo de 101 legisladores, 10 en contra y 09 abstenciones. Diez miembros del Parlamento no asistieron a la votación.
Huérfano de apoyo, Castillo Terrones y su familia salieron rápidamente de Palacio de Gobierno con el propósito de dirigirse a la Embajada de México para solicitar asilo político.
Lamentablemente para Pedro Castillo, la comitiva presidencial fue interceptada por los miembros de la Policía Nacional en la céntrica avenida Garcilaso de la Vega donde lo detuvieron y condujeron a las instalaciones de la Prefectura de Lima
En horas de la noche fue trasladado enmarrocado a la sede de la DIROES ubicada en Ate-Vitarte, donde purga prisión el presidiario Alberto Fujimori.
Pedro Castillo deberá afrontar un largo proceso por sedición y rebelión, amén de la acusación de liderar una red criminal que involucra a familiares, amigos y allegados al partido Perú Libre.
La aventura golpista y el aprovechamiento del poder para el cometido de actos de corrupción en perjuicio del Estado, le puede costar al ex mandatario por lo menos 10 años de la privación efectiva de la libertad.